Unas veces
por defecto y otras por exceso, casi nunca se habla de la realidad del fenómeno
hipnótico. Hay quien la presenta como algo poco menos que milagroso que lo cura
todo (desde los pies planos hasta la calvicie) y quien, por el contrario, la
presenta como una superchería propia de esas exhibiciones circenses de la
televisión o el teatro.
La hipnosis ha
tenido épocas de gran auge y aceptación por parte de la ciencia y otras que se
la ha relegado casi hasta el olvido.
Sin embargo,
cuando los clínicos la han utilizado nunca ha defraudado. La hipnosis se ha
mostrado altamente eficaz para solucionar conflictos y problemas psicosomáticos
resistentes a ser resueltos por las técnicas terapéuticas más clásicas de la
psicoterapia (psiquiatría y psicología oficial).
Estudios de
meta análisis realizados presentan la hipnosis como una técnica de intervención
que aumenta o potencia otros tratamientos. La evidencia práctica demuestra que,
tal y como ya indicó Edmonson en 1986, “la hipnosis, como procedimiento
terapéutico, puede ser considerada como una de las técnicas más antiguas que se
conocen para provocar cambios en los procesos cognitivos, psicofísiologicos,
perceptúales y conductuales”.
Si el mundo
de la psicología oficial, es decir, los que se auto titulan “científicos” o
“clínicos”, han experimentado con su propia metodología que los estados hipnóticos
hacen que cualquier terapia resulte más eficaz (amplía los sistemas
cognitivo-conductual, psicodinámico…), precisando menos sesiones para lograr
objetivos similares.
Repito: si
ellos mismos lo han constatado experimentalmente, ¿cómo es posible que todos,
absolutamente todos los clínicos en el campo de la psicología o psicoterapia,
no estén utilizando prioritariamente la hipnosis en sus acciones prácticas con
sus clientes?
Mientras que
el amable lector se hace esta pregunta o se la responde, yo le invito a
explorar y saber experiencialmente (vivenciarlo personalmente) qué es la hipnosis.
Y saberla utilizar en dos áreas principalmente:
- área personal: como autohipnosis, como autoayuda y evolución personal
- campo de la psicoterapia.
Y es aquí,
en esta segunda área, donde se encuentra mi labor, fundamentada en más de 30
años de experiencia, para que los pacientes encuentren el mejor camino para abordar
y solucionar sus problemas.
Siempre, claro
está, con el sistema más eficaz y eficiente, que no es otro que la hipnosis y
su “llave de oro” la PNL (Programación Neuro-Lingüística).
Aquí os dejo
un vídeo de un viejo programa del doctor Jiménez del Oso sobre la hipnosis, en
el que tuve el honor de colaborar. Aprovecho estas líneas para rendir un pequeño
homenaje a mi amigo Fernando, un ejemplo en casi todo lo que hizo durante su
vida.
El negocio de la psicología, punto y pelota. Pero también podemos añadir que la hipnosis tiene una parte de arte, que no es ciencia y ahí algunos o bastantes psicólogos se pierden. Y lo más lamentable es que te pregunten si eres psicólogo para utilizar la hipnosis, cuando en la facultad de psicología, por lo menos la de sevilla, la ignora. eso si, lo rápido que han sido algunos para aprender literalmente un guión para hacer dinero con el tabaco. El negocio. Un abrazo de Paco Vara.
ResponderEliminarLo rápido que han aprendido algunos el guion literal, que no significa que sean hipnólogos concretamente son psicólogos con un argumento, para el tabaquismo, pero el negocio que hay detrás. Puro negocio. Y lo más lamentable es que la facultad de psicología de sevilla la ignore, después te llega la persona de turno y te pregunta que si eres psicólogo. No Sra no soy psicólogo, me dedico a formarlos en ésta área. Un abrazo de paco vara.
ResponderEliminarEn la hipnosis ocurre como con todo en la vida, no todo el mundo es un buen conductor. No sólo hace falta tener buenos conocimientos, sino una gran intuición, un gran amor por lo que se hace, además de empatizar... y por supuesto una voz agradable y potente. No todo el mundo dispone de estas cualidades. Un diploma no capacita, sino la fe y la constancia.
ResponderEliminarHay cosas que no se aprenden en la facultad, sino que hay que "llevarlas dentro", y para ser buen hipnoterapeúta hacen falta, mucha falta...
La Hipnosis, yo opino, que puede parecer fácil pero requiere tiempo, mucha práctica, buenos profesionales que la impartan y personas interesadas en aplicarla. Aunque no se enseñe en la facultad, no deja de ser una herramienta de gran valor. ¡Ya me hubiera gustado que existiera cuando estudié!
ResponderEliminarHe tenido la oportunidad de hacer varios cursos con Horacio Ruiz y pienso que es uno de los profesionales que saben trasmitir sus conocimientos, algo que se agradece bastante.
Cuando alguien decide hacer un curso espera haber invertido bien su dinero y su tiempo y con este profesional yo puedo decir que se han cumplido mis deseos.